Villa en la isla de Phuket, Tailandia, 467 m²

La villa está inspirada en un simple deseo de eliminar todo lo superfluo, para lograr el orden natural, la tranquilidad y la paz. Varios elementos mágicos ayudan a crear armonía con la naturaleza tropical. Las generosas ventanas y la abundancia de vidrio le permiten experimentar el placer de fusionarse con el ambiente tropical. Una hermosa piscina une los pabellones, reflejando la luz en el amplio solarium y los espacios interiores. Un jardín ideal, independientemente de su tamaño, muestra plantas exóticas y un verdor que persiste durante todo el año.

El proyecto se basa en la tradición Feng Shui, una conocida filosofía oriental cuyas raíces se pierden en el tiempo. Cualquiera que esté dispuesto a comprar una villa de vacaciones normalmente busca escapar de la vida estresante que casi siempre le atormenta entre las cuatro paredes de un apartamento o de una oficina. Cuando creamos esta villa, nuestro primer objetivo fue brindar contacto directo con la naturaleza. Una gran cantidad de ventanas permiten que el viento penetre a través de las paredes de la casa, creando así una conexión visual con la vegetación y otros elementos naturales. Los dormitorios están separados del resto de la casa; El dormitorio principal está especialmente ubicado encima de la sala de estar, creando así dos pabellones separados pero aún conectados. Los baños cuentan con bañeras hechas a mano. En conclusión, los colores suaves elegidos para los interiores y el techo, junto con el verdor del hermoso jardín y el característico color azul de la piscina y la atractiva cascada, recuerdan a los colores y sonidos del mar.